El plexo braquial es un grupo de nervios que van desde la parte inferior del cuello a través del área de la parte superior del hombro. Estos nervios proporcionan el brazo, el antebrazo y la mano con movimiento y la sensibilidad. El daño a los nervios del plexo braquial puede ocasionar problemas musculares y de sensibilidad que a menudo están asociados con dolor en la misma área. Los síntomas pueden abarcar pérdida de la sensibilidad o sensaciones en el brazo o la mano, problemas para mover el brazo o falta de control muscular en el brazo, la mano o la muñeca.
Existen varias causas que pueden estar relacionadas con el daño en el plexo braquial:
- Traumática, que es la causa más común (Chad; 2006).
- Plexopatía nasal connatal, por desproporción pévica o por aplicar un fórceps. (Gilbert et al; 2009)
- Por compresión o atrapamiento, puede desencadnarse por cargar paquetes pesados o por compresión de correderas anatómicas. (Wynn; 1998)
- Patología vascular. (Brazis; 2007)
- Cirugía torácica, como una reducción mamari, simpatectomía o cirugía de lesiones intratorácicas (Brazis; 2007) (Mullins et al; 2007) (Patten; 1995).
- Por posición mantenida, dada la superficialidad del paquete nervioso es especialmente susceptible y puede lesionarse por compresión directa en cirugías prologadas, intoxicación por alcohol o drogas y coma. (Brazis, 2007) (Mullins et al, 2007) (Patten, 1995).
- Por causa de un tumor o secundario a tratamiento radioterápico (Chad; 2006) (Vargas et al; 2009).
- Fármacos y tóxicos, como algunos quimioterápicos, antibióticos como el metranidazol y tóxicos como la heroína. (Dabby et al; 2006)
- Enfermedades antiinflamatorias y auntoinmunes, como el lupus, (Moghekar et al; 2007).
- Idiopática: Neuralgia Amiotrófica o Síndrome de Parsonage Turner: plexitis idiopática o seguida de infección viral, inmunización o cirugía reciente, con afectación predominantemente de nervios axilar, supraescapular, musculocutáneo y torácico largo (Kahle, 2008). También se ha descrito una forma hereditaria, con patrón autosómico dominante, que cursa con episodios recurrentes de plexopatía braquial. (Alfen et al; 2009) (Chad;2006).
- Infecciones como la lepra y la tuberculosis, la enfermedad de Lyme (Wendling et al; 2009), VIH, y familia herpes como los más frecuentes (Staal et al; 1999).
El herpes zoster es una neuropatía que provoca una erupción vesicular en la distribución de los nervios afectados. Se produce como consecuencia de la reactivación del virus varicela-zoster latente, con frecuencia ante una situación que altera o disminuye la inmunidad.
La alimentación en el tratamiento natural del herpes consiste en introducir aquellos alimentos que intervienen en la recuperación de las lesiones así como aquello preventivos para evitar la reaparición de la enfermedad.
Destacaremos la importancia de administrar al paciente vitamina C, ya que debido a su acción cicatrizante ayudará al paciente a sanar las lesiones. También sabemos que es precursora del colágeno con lo que vendrá muy bien regenerar el tejido dañado. Por tanto es recomendable aumentar el consumo de limones y otros cítricos, kiwis, acerola, coles, granada… (Bioorg Med Chem Lett)
Además es de gran ayuda proveer al cuerpo de flavonoides en especial, las catequinas del té verde, que junto a la vitamina C, son capaces de neutralizar ciertos virus como el del herpes. Otros bioflavonoides usados en el tratamiento del herpes son las catequinas presentes en las peras, la quercetina de la cebolla, la rutina en las moras o uvas, etc…
También es aconsejable administrar vitamina E, que nos ayudará como antioxidante y a evitar la oxidación de las membranas celulares.
De los aminoácidos, ha sido demostrado en muchos estudios, la acción de la lisina en el tratamiento del herpes. Los alimentos más ricos en lisina son el apio, col, papayas, aguacates, uvas. (Farrar CT, Buhrman JS, Liu G, Kleijn A, Lamfers ML, McMahon MT, Gilad AA, Fulci G)
De igual modo algunos estudios han mostrado que el aminoácido arginina favorece la aparición del brote del herpes, por lo deben evitarse en una crisis herpética, las semillas o frutos secos en especial las nueces que son muy ricas en arginina, Otros alimentos ricos en arginina son las calabazas, el sésamo, anacardos, coliflor, coles, achicoria, lentejas, guisantes… (Grady SL, Purdy JG, Rabinowitz JD, Shenk T)
De los minerales destacaremos el aporte de Zinc, por su acción cicatrizante e inmunoestimulante, destacando alimentos como las semillas de calabaza, pero que al ser rica en arginina no sería tan adecuadas, con lo que mejor podríamos extraerlo de alimentos como el apio, la cebolla, los rábanos, las papayas o los melocotes.
Sería también interesante introducir ácidos grasos esenciales por su acción antiinflamatoria, como el omega 3, presentes en las semillas de chía, lino, el pescado azul; ácidos grasos de la serie omega, presentes en la granada con gran acción antiinflamatoria, y ácidos grasos de la serie omega 9 presentes en el aguacate o el aceite de oliva.
Isoflavonas presentes en la soja, especialmente la genisteina, han mostrado también un efecto inhibidor en la reproducción del herpes, según un estudio publicado en la Universidad Federal de Río Grande. (Arch Virol 2015 Sep)
El complejo de vitaminas B, en especial la B1, B6 y B12, es de gran ayuda para la salud de los nervios, que en numerosas ocasiones se ven afectados en la infección herpética. Por ello es aconsejable elegir cereales integrales para mantener intactas estas vitaminas.
Por tanto pues además de los otros posibles tratamientos farmacológicos con una buena nutrición podemos ayudar a afrontar el herpes y lexiones del plexo raquídeo producidos por este virus.
Rosa López Monís
BIBLIOGRAFÍA:
-Alfen N, Engelen BG (2006). The clinical spectrum of neuralgic amyotrophy in 246 cases. Brain. 129:438-50.
-Brazis PW; Masdeu JC; Biller J (Eds) (2007). Cervical, Brachial, and Lumbosacral Plexi. En: Localization in Clinical Neurology (pp 73-89). Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins.
-Chad D (2006) Enfermedades de las raíces y plexos nerviosos. En: Bradley W. (Ed). Neurología Clínica, (pp 2247-2275). Madrid: Elsevier.
-Dabby R, Djaldetti R, Gilad R, Herman O, Frand J, Sadeh M, Watemberg N (2006) Acute heroin-related neuropathy. J Peripher Nerv Syst,11(4):304-9.
-Gilbert A (2009). Management and results of treating obstetrical palsy in the new-born. Neurochirurgie. 55(4-5):427-31.
-Mullins GM, O’Sullivan SS, Neligan A, Daly S, Galvin RJ, Sweeney BJ, McNamara B (2007). Non-traumatic brachial plexopathies, clinical, radiological and neurophysiological findings from a tertiary centre. Clin Neurol Neurosurg. 109(8):661-6.
-Patten J (Ed) (1995). Diagnosis of Cervical Root and Peripheral nerve lesions Affecting the Arm. En: Neurological differential diagnosis, (pp 282-299). Argentina: Springer.
-Vargas M, Beaulieu J, Magistris M, Della Santa D, Delavelle J (2009). Aspects cliniques, électroneuromyographiques et IRM des traumatismes du plexus brachial. Clinical findings, electroneuromyography and RMI in trauma of the brachial plexus. Neurosurg Clin N Am. 20(1):1-14.
-Wynn Parry CB (1998). Braquial Plexus injuries. En: Matthews (Ed). Neuropathies, (pp 143-157). Londres: Elsevier.
– Farrar CT, Buhrman JS, Liu G, Kleijn A, Lamfers ML, McMahon MT, Gilad AA, Fulci G. Radiology. 2015 Jun;275(3):746-54. doi: 10.1148/radiol.14140251. Epub 2015 Feb 13.
PMID: 25686366
– Grady SL, Purdy JG, Rabinowitz JD, Shenk T.
Proc Natl Acad Sci U S A. 2013 Dec 17;110(51):E5006-15. doi: 10.1073/pnas.1321305110. Epub 2013 Dec 2.
PMID:24297925
– Biorg Med 2012 Apr 1;22(7):2424-7. doi: 10.1016/j.bmcl.2012.02.022. Epub 2012 Feb 16.
Radical-regulating and antiviral properties of ascorbic acid and its derivatives.
– Arch Virol 2015 Sep;160(9):2335-42. doi: 10.1007/s00705-015-2514-z. Epub 2015 Jul 10. Antiherpes evaluation of soybean isoflavonoids.